El faisán (Leccinum lepidum) no es un pájaro, al menos para nosotros, se trata de una seta comestible apreciada en muchos lugares. Es muy conocido en el sur de la península, donde se recolecta más que en zonas norteñas. Crece en alcornocales, encinares y quejigales, en otoño y principios de invierno; fructifica en primaveras lluviosas.
La carne es compacta. De color amarillento, al corte se torna, en su porción media superior, lentamente rosa pálida y finalmente, al cabo de unos minutos, gris-violácea. Olor y sabor agradables.
Tiene un sombrero hemisférico a convexo, de hasta 15 cm de diámetro. Margen incurvado y algo excendente. Cutícula de color ocre-parduzco a ocre-amarillenta, en mayor o menor medida oscura, mate, rugosa, abollada y viscosa en tiempo húmedo. Su pie es ventrudo a cilíndrico, en ocasiones sinuoso y con la base frecuentemente algo radicante. De color amarillento o amarillo-ocráceo, con matices parduzcos a la vejez. Superficie decorada por granulaciones concoloras al pie o pardo-rojizas. De 5 a 15 cm de largo y 2 a 6 cm de grosor. Dispone de himenio formado por tubos libres, largos, de color amarillo, al corte pardo-grisáceo. Poros pequeños, esféricos; de color amarillo, viran al gris-ocráceo al roce.
Puede confundirse en el faisán de Jara (Leccinum corsicum), también comestible, pero que se diferencia por su menor tamaño, cutícula pardo oscura y crecer como micorrizógeno asociado a diversas especies de jaras (Cistus ladanifer, C. monspeliensis, C. albidus).
Porque le llaman faisán?