Si hay algo que le gusta al setero son las tormentas de primavera, no por el echo de sacar el paraguas coger el poncho y irse a mojarse, sino porque es señal de setas termófilas como los boletus y las amanitas. En alguna ocasión ya hemos hablado como se forman las tormentas.
La explicación está a varios kilómetros de altura sobre nuestras cabezas, donde una perturbación atlántica se sitúa encima de la península. Se trata de una masa de aire frío que circula en altura de oeste a este y que, al entrar en contacto con el aire más cálido en las capas más bajas de la atmósfera, genera inestabilidad y fuertes tormentas.
Así que no dejes pasar la oportunidad de seguir donde se forman estas tormentas. Tienes toda la información en nuestra sección de información meterológica de Cesta y Setas.