Para los que no conocen el mundillo de las setas eso de buscar setas todo el año les suena a chino, pero sí, hay setas durante todo el año, hasta en verano. Las conocidas como setas de verano suelen ser solo para los más intrépidos y ya avanzamos que son muy agradecidas cuando las encuentras.
La lista es más extensa de estas 5 setas de verano, pero creemos que son las que más partido gastronómico puedes sacar. Por supuesto, dependerá donde y cuando las busques y uno de los factores más determinantes serán las lluvias previas en forma de tormentas estivales.
Hongo Negro (Boletus aereus)
El Boletus aereus conocido vulgarmente como hongo negro es posiblemente el boletus más sabroso de todos los del grupo edulis. Aparece en bosques de robles, encinas o alcornoques principalmente. De carne blanca como todos sus hermanos, se caracteriza principalmente por tener el sombrero más oscuro que incluso en ocasiones es totalmente negro. Para buscarlo deberás dar con el hábitat y buscarlo en un ciclo de 14-15 días después de tormentas. Es de suelo ácido.

Boleto de verano (Boletus aestivalis)
Otro boletus de la familia edulis que aparece en verano es el Boletus aestivalis o boleto de verano. Asociado a robles, hayas y zonas de brezos. Principalmente se diferencia por tener una malla muy característica en el pie. De color de sombrero más claro que el hongo negro. Su ciclo es de 14-15 días después de las lluvias, como casi todos los boletus. Se debe buscar en suelos ácidos.
Rebozuelo (Cantharellus cibarius)
Los rebozuelos son de un color amarillo intenso, conocido en Europa como chantarella su nombre científico es Cantharellus cibarius. Se suele confundir con el Cantharellus pallens de mayor porte y con tonos blanquecinos, el cibarius es totalmente amarillo. Desprende un agradable olor a melocotón o albaricoque que lo hace apto incluso para postres. En verano el rebozuelo suele aparecer en el norte de la península principalmente en hayedos pero también hace acto de presencia cerca de humedales y turberas en zonas de pinos de alta montaña. Su ciclo es bastante largo y requiere de lluvias más o menos constantes en un periodo de 30-40 días ya que su crecimiento es muy lento.

Oronja (Amanita caesarea)
Tana, oronja, yema y otros muchos nombre vulgares tiene la Amanita caesarea. Es posiblemente una de las setas más bonitas ya que su sombrero naranja y pie amarillo le confieren un aspecto muy apetecible. Como muchas amanitas aparece de un «huevo», en esta fase es muy peligrosa recolectarla ya que existen amanitas mortales que aparecen de la misma forma que todos los años producen peligrosas intoxicaciones. Su ciclo de aparición es de 35-40 días después de las lluvias estivales. Se decanta por aparecer en encinares, robledales y alcornocales. En las zonas del sur de la Península es muy buscada.

Níscalo (Lactarius deliciosus)
Sorprende que esta seta tan otoñal aparezca en una lista de setas de verano, pero sí, el níscalo aparece también en verano. No es tan frecuente como las otras setas que hemos descrito pero en años como este donde ha habido un junio tan lluvioso el ciclo de los 40 días se cumple antes y en los sitios donde sea propicia su aparición, como pinares de alta montaña, va a ser posible encontrarlos a principios y mediados de agosto.

Si estas preparado estas vacaciones para salir al bosque en busca de sus frutos mejor guardados Cesta y Setas pone a tu disposición la mejor selección de herramientas para seteros. ¡Feliz verano!